Law of Thelema

"Do what thou wilt shall be the whole of the Law" es llamada la Ley de Thelema, la ley por la que se rigen los seguidores de la Corriente Thelemita y Maatiana. Es cierto que hay otras leyes, pero siempre supeditadas a la Ley de Thelema. Pero esta ley promulgada por una entidad no humana, Aiwass, y transmitida a la sociedad por el célebre Aleister Crowley ha creado muchas controversias y equívocos. Y principalmente por las malas traducciones de la frase a otros idiomas y el desconocimiento de su propia lengua en algunas culturas angloparlantes.

En una primera lectura superficial de la frase podríamos traducirla por "Hacer lo que tu quieras será la totalidad de la Ley". Es decir, "haz lo que te venga en gana". Lo cierto es que para una recomendación semejante sobrarían los problemas suscitados e incluso la propia ley.

En una segunda lectura, ya no tan superficial, y especialmente si conocemos el gusto de Aleister Crowley y de algunos iniciados en escribir el inglés antiguo, observaremos la palabra thou cuyo significado Tu, con mayúscula dado que solamente se usa para la divinidad. Este arcaísmo nos permite observar que la voluntad a la que se refiere la citada ley no es la voluntad habitual con la que nos movemos los seres humanos, sino a lo que en algunas religiones se refiere como la "Voluntad del Padre", es decir Dios para algunos, Self superior para otros, Voz Interna, Don del Aguila,... y muchos mas nombres pero que tienen en común definir "algo" superior a la voluntad humana del "quiero/no quiero", "me gusta/no me gusta",....

Concluyendo, la ley no es seguir nuestros caprichos, sino esa voz interna que todo ser humano siente en su interior ... de vez en cuando.

Ahora bien, ¨que es la Verdadera Voluntad? ¨Donde está ese punto de inflexión entre lo que creemos que es "Nuestra" Verdadera Voluntad y "Su" Verdadera Voluntad?

Quizás sea este el gran reto del Buscador. Cuando "Nuestra" y "Su" Voluntad están afinadas, están "alineadas" nos encontramos con la Verdadera Voluntad, la Voluntad del Principio Innombrable que subyace tras todo ser vivo; esa coherencia con la Creación, con el Orden Cósmico.

La Verdadera Voluntad está tan relacionada con el Universo como con la Etica personal. Etica personal, no moral social. Lo que sentimos que nos grita en nuestro interior, no lo que nos dicen desde el exterior; lo que vemos con nuestros ojos, en lo exterior y en lo interior, no lo que nos susurran en los oídos el mundo, muchas veces frustrado o mediatizado de nuestros lideres políticos, sociales o religiosos, que, aunque a veces de buena fe, nos predisponen hacia un camino sin altibajos, sin dudas,.. y por tanto sin preguntas.

El primer paso en el camino es conocernos a nosotros mismo. ­Nada mas fácil y ... nada más difícil! Eso implica conocer todo nuestro potencial, nuestras virtudes y nuestros defectos, nuestros gustos y nuestras fobias,... Todo, absolutamente todo lo que somos, cuerpo, alma, mente, espíritu...deseos, ansias, complejos, aberraciones...TODO eso hay que conocer y reconocer ante uno mismo. En privado, en nuestro mundo debemos decirnos "soy ..." y aceptarlo.

Un ocultista español comentó una vez "Lo difícil es llegar a conocerse, y seguir queriéndose". Y es exactamente eso lo que debemos hacer: Querernos a nosotros mismos,.. porque al comenzar a querernos a nosotros mismos comenzamos a querer a la Creación

Este primer paso del proceso nos lleva a sentir la Verdad como un eje sobre el que gira nuestra vida, y ese eje de sinceridad con nosotros mismos, de claridad mental y de verdad con los que nos rodea, crea el camino para el contacto con nuestro Self Interno, con ese punto de divinidad que toda existencia tiene por derecho propio; esa chispa divina de la que hablan todos los ocultistas, alquimistas, hermetistas,..., simplemente buscadores de si mismos. Esa chispa de divinidad de la que C.G. Jung nos dice:

"El hombre es una puerta por la que entramos desde el mundo exterior de los dioses, demonios y almas, al mundo interior; desde el mundo grande al mundo más pequeño. El hombre es pequeño e insignificante; enseguida le dejamos atrás, y así entramos en el espacio infinito, en el microcosmos, en la eternidad interior.

En la distancia inconmensurable brilla una estrella solitaria en el cenit. Este es el Dios único de esta solitaria estrella. Este es su mundo, su Pleroma, su divinidad.

En este mundo, el hombre es el Abraxas, que crea y devora a su propio mundo.

Esta estrella es el Dios y el objetivo del hombre.

Este es el Dios que le guía: en él, el hombre encuentra descanso."

(VII Sermones ad Mortuos)

Cuando ese Yo personal deja de lado sus apetencias y comienza a escuchar a ese otro Yo Interno y a seguir sus "recomendaciones" comienza el verdadero trabajo interno, donde en términos metafóricos llegamos al "Conocimiento y Conversación con el Santo Angel Guardián". Y es esta "Conversación" la que nos va dictando la Voluntad Superior, la Verdadera Voluntad para integrarnos en el Plan Divino.